MARÍA ROSTWOROWSKI

 La excelencia de la Historia

Cuando le preguntaron a María sobre cómo le gustaría ser recordada y ella respondió “como alguien que amó muchísimo al mundo andino y trato de compartir ese amor con los demás peruanos”. Esa quizá sea la respuesta que mejor resume la vida de María quien desde joven se interesó por el mundo andino.

María nació en Barranco, Lima. Hija de padre polaco y madre puneña, doña Rita Tovar. Fue educada en Polonia, Francia e Inglaterra, precisamente en Francia su padre tenía una hacienda por eso le gustaba el campo, como ella dice que “se siente en el fondo campesina”.

Iba a escuchar clases en la Universidad San Marcos, sin ser alumna de ahí, ella siempre decía que era autodidacta. Iba a las clases de grandes personajes como Tello, Luis Valcárcel, Porras Barnechea, precisamente él le consiguió el permiso para que pudiera asistir como alumna libre y hasta podía sacar libros de la universidad.

Fue el también quien le enseño a investigar, ella cuenta que cuando le dijo que quería investigar al Inca Pachacútec y le mostro sus cuadernos, él le dijo “hay que votar esto, hay que hacer fichas”, fue entonces que aprendió los primeros pasos de la investigación.

Su primer libro fue Pachacútec Inca Yupanqui, donde  expone el rol fundamental que tuvo el Inca Pachacútec en la expansión y organización del tawantinsuyo. Este libro gano el premio Nacional de Cultura en 1952 y publicado un año después.

Después Porras Barnechea le propuso estudia a Toledo, pero ella respondió “no quiero saber nada del Virreinato yo me quedo con el ande”, esta frase es lo que hace de María una mujer excepcional porque revolucionó la idea que se tenía sobre el  ande.

María también viajó a la selva, navegó durante 23 horas por el Amazonas hasta el leprosorio de San pablo (Loreto) en plan de misionera, demostrando que tiene un gran corazón dice “los leprosos me dieron más de los que le di”.

María sabia hablar el Inglés, Fransés y Polaco

Tras haber contraído segundas nupcias con Alejandro Diez Canseco, en el año 1961 repentinamente muere. Después de eso tuvo una etapa empresarial porque heredó una ladrillera.

Escribió otros libros como Curacas y Sucesiones, Casta Peruana y Prehispánica, Señoríos Indígenas de Lima, entre otros.

Este gusto por la historia se define en sus celebres frase como, “siempre he sido una curiosa” o “la historia es un inmenso porque”.

En 1988 llegaría su libro más difundido, Historia del Tahuantinsuyo y se convertiría en un éxito en el Perú y en el extranjero. María es una investigadora nata ha escrito tantos libros que uno se pregunta qué no ha hecho María y ella responde.

Su principal libro

 
“eso ha sido una pasión en mi vida, entonces es difícil decir hasta aquí nomas, mientras se pueda seguiré”. También es una persona sencilla y cordial firme en sus decisiones.

La señora María tiene el merito que en una prosa muy sencilla, explica todas sus investigaciones y elevarlas a una dimensión histórica inteligible.

Tiene muchos premios como Doctora Honoris Causa de la Pontificia Universidad Católica del Perú, San Agustín, de Arequipa; Universidad
Católica del San María, Arequipa; Universidad Femenina del Sagrado Corazón y Universidad de Trujillo.

En 1997 la Biblioteca Nacional del Perú, puso su retrato en la galería de intelectuales. Entre sus cargos estuvo el Museo Nacional de Historia, presidió la Asociación Peruana de Etnohistoria y fundadora del Instituto de Estudios Peruano e investigador principal el mismo.

Con talento y tenacidad María ha logrado una notable contribución  a la cultura peruana, también contribuyo a restablecer la identidad nacional. Sus libros se han convertido en una consulta, no sólo de colegios sino también de universidades del Perú y del extranjero.